El síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) es la fase más avanzada de la infección causada por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
El contagio del VIH se produce vía sexual o parenteral. También se transmite de madre a hijos durante el embarazo, el parto y la lactancia.
Los síntomas se pueden confudir con los de la mononucleosis o la gripe. Los síntomas pueden incluir: fiebre, erupción maculopapular, artralgia, mialgia, malestar, linfoadenopatía, úlceras orales, faringitis y pérdida de peso.